Ante el confinamiento que atravesamos debido a la pandemia del Covid-19, más empresas se están sumando a dar un giro total a su modelo de negocio para mejorar las actividades del trabajo remoto.
Claro está que grandes empresas han sabido afrontar diversas situaciones de crisis. Cada una de estas han sido previamente analizadas, y para ello se tuvo un protocolo sobre qué hacer en caso ocurriera dicho escenario. Sin embargo, probablemente en ningún plan de crisis estaba previsto una pandemia y que acciones realizar ante ella.
El 79 % de ejecutivos han señalado que sus empresas se han sometido a un cambio de modelo de negocio, según el Índice de Transformación Digital de Dell Technologies de 2020, siendo el trabajo remoto la principal implementación.
Asimismo, según una investigación por la empresa Dell Technologies, alrededor de un 89% de ejecutivos reforzarán su negocio digital en los próximos años si sus empresas afrontan con buenos resultados esta situación en pandemia.
Por ello, hoy veremos cuatro principales factores que se deben tomar en cuenta para el trabajo remoto en las empresas.
1. Participación y misión compartida
El trabajo remoto ha traído consigo nuevos retos para los colaboradores, puesto que la manera de comunicarse y realizar las acciones laborales es distinta a las presenciales.
Es muy importante aquí que se evalúe las funciones de cada miembro de la empresa, para evitar inconvenientes. Sin embargo, es en esta situación donde el colaborador debe aprender nuevas delegaciones y no quedarse en una sola área.
Estas nuevas funciones se pueden lograr gracias a toda la información que el colaborador puede encontrar de manera virtual.
2. Inmediatez en el equipo
Este factor ha sido desde siempre un requisito solicitado por toda empresa. Pero ante esta situación de confinamiento, es mucho más exigente contar con la capacidad de inmediatez para cumplir funciones por parte de los colaboradores.
Para lograrlo, se deben usar metodologías apropiadas para un centro de trabajo. Por ejemplo, “scrum”, este método tiene entre sus objetivos: la rapidez de colaboradores. Se trata de un proyecto en conjunto con todos los miembros de la empresa para incrementar el valor de productividad, ventas, inmediatez, entre otras metas trazadas por el equipo.
Además, es importante que, al ser un trabajo virtual, se pueda establecer fechas de vencimiento sobre algún pendiente o proyecto, esto ayudará a que sean cumplidas sin el error de aplazarlas.
3. Plan de riesgo
Cuando empezó la propagación de la Covid-19 no se tenía previsto un plan de riesgo para resolverlo. Ni las grandes empresas se antepusieron a esta situación.
Es por esto que hoy muchas empresas han decidido ser más específicas en cuanto a evaluar todo tipo de riesgo o crisis que se atraviese. Tomando como acción: colocar a una sola persona encargada de realizar medidas de contingencia si en caso la empresa pasa por una situación negativa.
Esta evaluación debe ser constante y, sobre todo, debe existir una persona por cada área, es decir, si en una empresa existen ocho áreas, cada una de ellas deberá tener un especialista en velar por un respectivo plan de riesgo.
4. Adaptabilidad
Ahora más que nunca las empresas toman a este factor como uno trascendental. Pues si bien es cierto, anteriormente, esto ya era requerido, hoy se acentúa más, teniendo en cuenta que nos encontramos ante una era digital y el trabajo así lo demanda.
Se sabe que un colaborador con esta capacidad podrá resaltar sobre otro durante el trabajo remoto. Y probablemente este modelo de negocio continúe, por lo que se espera que desde ya todo postulante pueda tomar la adaptabilidad como un aspecto principal para laboral.
Estos han sido algunos factores que podemos alcanzar tras el contexto que vivimos sobre un nuevo modelo de negocio con el trabajo remoto en una organización.
Recuerda que, en la actualidad, la digitalización y las nuevas tecnologías resultan cada vez más indispensables en las organizaciones.
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Nos vemos en un próximo artículo.
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